¿Quieres cambiarte la prótesis dental por implantes pero no puedes porque no cuentas con suficiente hueso? Los defectos óseos en nuestro hueso maxilar o mandibular son más comunes de lo que parece y pueden dificultar la colocación de implantes dentales. Sin embargo, en estos casos existe una alternativa: el injerto óseo dental.
En este artículo de Dentaly te explicamos todo lo que debes saber antes de hacerte un injerto de hueso dental: qué es, procedimientos y precio medio en España de la intervención.
Table of contents
- 1 ¿Qué es el injerto de hueso dental?
- 2 ¿Qué puede ocasionar pérdida ósea?
- 3 ¿De que forma pueden actuar los injertos de hueso dental?
- 4 Tipos de injerto de hueso dental
- 5 ¿De qué áreas puede extraerse hueso para utilizarlo como injerto óseo dental?
- 6 ¿En qué casos es necesario el injerto de hueso dental?
- 7 Posibles complicaciones durante y después de una intervención de injerto óseo dental
- 8 Precios del injerto óseo dental en España
- 9 Preguntas frecuentes
¿Qué es el injerto de hueso dental?
El injerto óseo, es una técnica quirúrgica realizada con el fin de aumentar la cantidad de hueso necesaria que ha sido perdida por diferentes factores y conseguir restablecer las funciones de soporte dental y la estética. El injerto de hueso dental se realiza con materiales de rellenos óseos que pueden ser de origen animal o sintéticas.
¿Qué puede ocasionar pérdida ósea?
La resorción ósea es la pérdida de hueso. Está perdida ósea puede producirse por varios factores:


- Ausencias de dientes.
- Traumatismos.
- Tumores o quistes.
- Uso de prótesis removible.
- Enfermedad periodontal.
- Reabsorción ósea fisiológica que se produce en la vejez.
Con las ausencias dentales se producen otros problemas además de la pérdida de hueso, también puede surgir la dificultad para pronunciar adecuadamente, a nivel articular también hay problemas al no existir una oclusión adecuada.


¿De que forma pueden actuar los injertos de hueso dental?
Los diferentes materiales utilizados pueden actuar por al menos uno de los tres mecanismos:
- Osteogénesis: formación de hueso nuevo a partir de células derivadas del injerto o del huésped.
- Osteoinducción: es un proceso que estimula la osteogénesis, los materiales osteoinductivos pueden hacer crecer el hueso en la zona donde no se encuentra.
- Osteoconducción: es un proceso mediante el cual el material provee un ambiente apropiado para la aposición de hueso nuevo.
El injerto óseo normal debe tener estas tres propiedades, además de ser compatible. En el siguiente vídeo te mostramos el proceso para la colocación de un injerto óseo:
Tipos de injerto de hueso dental


Los tipos de injertos óseos son fragmentos de tejido óseo particulado o en bloque y se va a obtener de una zona donante alejada de la región donde será colocado el injerto sin que llegue afectar la anatomía ósea del paciente.
Entre los tipos de injertos óseos tenemos:
Autoinjertos
Este tipo de injerto son retirados de un área donante del mismo paciente. Permite el trasplante de células vivas, evitan la transmisión de enfermedades infecto contagiosas y no existe rechazo inmunológico, ya que el material injertado proviene del propio individuo.
Se puede obtener de sitios dentro de la cavidad oral como el mentón, tuberosidad del maxilar, rama ascendente de la mandíbula para áreas pequeñas. Cuando se requiere de mayor cantidad se puede obtener de la cresta ilíaca , tibia o calota.
Aloinjerto
Este tipo de injerto es obtenido de otro individuo. En la actualidad es el más utilizado para rehabilitar defectos en el hueso.
Xenoinjertos
Es un injerto procedente de donantes de especies no humanas, obtenidos mediante la extracción de minerales procesados y eliminación de antígenos del hueso (bovino o equino), con el propósito de retener contenido mineral óseo. La estructura que tiene este hueso, es equivalente al hueso humano por lo que las células óseas pueden regenerarse a través de él.


¿De qué áreas puede extraerse hueso para utilizarlo como injerto óseo dental?
Los injertos óseos que se utilizan en cirugías bucales pueden ser de origen extrabucal (fuera de la boca) o intrabucal (dentro de la boca), dependiendo del tamaño del defecto óseo.
Injerto óseo de origen intrabucal


Los injertos óseos intraorales pueden ser obtenidos a través de:
- Sínfisis mandibular: es un hueso de origen membranoso, por lo que se presenta una menor reabsorción. El injerto de mentón se talla 5 mm por debajo de las raíces de los dientes, entre los dos agujeros mentonianos.
- Rama ascendente mandibular.
- Tuberosidad del maxilar: es un hueso esponjoso del cual se obtiene una pequeña cantidad de tejido óseo.
- Torus mandibular: es una excelente zona de injertos corticales.
Injerto óseo de origen extrabucal
- Cresta ilíaca: es una excelente zona donante de huesos corticales esponjosos.
- Calota.
- Tibia: es un excelente injerto óseo cuando se requiere cantidades de 10 a 15 cc.
¿En qué casos es necesario el injerto de hueso dental?
Normalmente, se realiza un injerto de hueso dental cuando se necesita realizar una rehabilitación con prótesis fija como son los implantes, ya sea de uno o varias piezas a reemplazar. Realizar un injerto de hueso dental, va a garantizar un adecuado soporte óseo para los implantes y de esta forma rehabilitar la boca.
Cuando se necesita colocar implantes en el maxilar superior es posible que el especialista recomiende el uso de implantes cigomáticos ya que estos no requieren de otros procedimientos extra como un injerto óseo o una elevación de seno maxilar.


Preservación del alvéolo
Cuando se pierde un diente, o tras una extracción, el hueso sufre un proceso de remodelación ósea por defecto. Donde anteriormente existía una raíz dental y un diente, ahora hay un espacio vacío llamado alvéolo.
Este alvéolo en su cicatrización se va a colapsar y va a perderse una gran cantidad de hueso a lo ancho y alto. Si las extracciones dentales son consecutivas la pérdida ósea se agrava y se hace más extensa. Para conservar el volumen y que el alvéolo no colapse se recomienda colocar un injerto óseo.
Elevación del seno del maxilar
Los senos maxilares son unas cavidades ubicadas en el maxilar superior y forman parte de las vías áreas. Cuando existe una pérdida dental relacionada con el seno maxilar se requiere utilizar injerto óseo en el interior del seno maxilar.
Regeneración periodontal
La enfermedad periodontal causa pérdida de hueso en una fase muy avanzada. Una vez que se haya tratado la enfermedad periodontal se puede colocar injerto óseo con la finalidad de preservar y prolongar la vida de los dientes en la boca.
Regeneración periimplantaria
Tras la popularización del tratamiento con implantes han surgido problemas que pueden afectar la superveniencia de los propios implantes dentales. Uno de los inconvenientes es que puede provocar periimplantitis, es decir, pérdida ósea alrededor de los implantes. En algunos casos se recomienda colocar injerto óseo para detener la pérdida de tejido óseo.
Regeneración ósea horizontal y vertical
Cuando existe una gran reabsorción ósea producida por la pérdida de dientes se hace necesario regenerar el hueso de manera vertical, horizontal o ambas. Para ello, se utiliza distintos tipos de relleno óseo y barreras biológicas para recuperar toda esa estructura pérdida.
Posibles complicaciones durante y después de una intervención de injerto óseo dental
Este procedimiento conlleva una cirugía compleja, en la que existen diferentes factores que pueden hacer fallar el tratamiento.
Antes de cualquier procedimiento, el odontólogo te explicará en qué consiste el proceso y cuáles son las indicaciones que tienes que llevar a cabo, además de las posibles complicaciones del tratamiento. Algunas de ellas son:
- Rechazo del injerto.
- Posible lesión de los nervios y músculos cercanos.
- Daño a las raíces de los dientes adyacentes.
En el caso de que surja alguna complicación debes saber que tu odontólogo te realizará diferentes revisiones periódicas para tratarlas, por lo que es importante asistir a cada una de ellas así como evaluar el estado y como reacciona el organismo con el injerto del hueso dental.
Precios del injerto óseo dental en España
Tipo de injerto | Precio |
Membrana de colágeno | 150 € |
Expansión ósea | 180 € |
Regeneración de hueso liofilizado | 200 € |
El procedimiento del injerto óseo implica restablecer un problema estético y funcional, por lo que su tratamiento debe llevarse a cabo mediante un equipo multidisciplinario en el que deben participar el cirujano, el ortodoncista y radiólogo con el objetivo de brindar la mejor atención a los pacientes.


El empleo de injerto óseo como alternativa a defectos óseos son una excelente alternativa, por lo que es muy recomendable para restablecer la ausencia de hueso.
Los injertos de hueso dental constituyen un elemento importante para la implantología dental, sobre todo en aquellos casos en los que la falta de hueso no permite el uso de implantes dentales para lograr rehabilitaciones duraderas y de calidad, por lo que el uso de injertos de hueso dental se hace muy necesario e importante para de esta forma darle paso libre al uso de implantes dentales.
Otra opción para la pérdida de hueso son los implantes corticales, unas placas finas de titanio, que se hacen a la medida de cada persona y se anclan con tornillos de titanio en el hueso cortical.
Preguntas frecuentes
¿Cuánto tarda en sanar un injerto de hueso dental?
La recuperación suele tomar tres meses pero en algunos casos puede pasar todo un año antes de que puedas ponerte los implantes dentales.
¿Qué comer después de un injerto de hueso dental?
Después de que el efecto de la anestesia haya desaparecido, puedes comer alimentos blandos como yogurt, compotas de frutas, puré de patatas, sopas, batidos de frutas y de proteínas, etc. Puede que no seas capaz de comer alimentos sólidos por unos días.
¿Qué cuidados hay que tener después de una intervención de injerto óseo dental?
Para conseguir una pronta recuperación es necesario seguir una serie de instrucciones:
- No molestar o tocar la herida: debes ser lo más cuidadoso alrededor del área del injerto del hueso.
- Evitar enjuagarse o escupir durante al menos dos días parea permitir que se formen coágulos de sangre y el material de injerto se estabilice.
- No aplicar presión con la lengua o los dedos en la zona de injerto.
- No fumar: el humo del tabaco reduce el flujo de sangre, contamina la herida y causa infecciones frecuentemente.
- Tomar muchos líquidos y evitar las comidas sólidas y calientes.
- La buena higiene oral es esencial para una buena curación.
- No realizar esfuerzos durante los primeros días.
- Revista Scielo. Regeneración ósea guiada para el aumento vertical del reborde alveolar. Consultado el 20 de Marzo de 2020.
- Revista Scielo. Injerto óseo simultaneo a la colocación de implantes. A propósito de un caso. Consultado el 20 de Marzo de 2020.
- Revista Scielo. Injertos óseos y biomateriales en implantología oral. Consultado el 20 de Marzo de 2020.