Retrognatia: qué es, tipos y por qué se produce

La retrognatia o retrognacia mandibular, también llamada mandíbula retraída, es una deformidad dental y facial común que puede llevar a tener una maloclusión dental. Las personas con retrognatia pueden experimentar problemas de mordida, dificultad para hablar o masticar.

La retrognatia (retrognatismo) deriva del latín retro, “hacia atrás”, y es una deformidad también llamada “mandíbula corta”. Es fácilmente reconocible y puede ser un problema estético, ya que para tener una buena estética y una mordida normal, la mandíbula y el maxilar superior deben estar armoniosamente relacionadas en forma, tamaño y posición. 

¿Te gustaría saber más? En este artículo te explicamos qué es, cuáles son sus causas y cómo se trata la retrognatia.

¿Qué es la retrognatia mandibular?

La retracción mandibular o retrognatismo sucede cuando hay una falta de proyección de la mandíbula, es decir, cuando esta se encuentra atrasada respecto al maxilar superior. Esto puede producir una apariencia poco armoniosa conocida como “mentón débil”.

Como resultado, las filas de dientes no coinciden. Los dientes superiores sobresalen sobre los inferiores y la mandíbula queda retrasada. Se presenta con una mordida muy abierta y una barbilla poco prominente, pero también hay casos en que la barbilla resulta ser casi inexistente.

Retrognatia causas

En la mayoría de los casos, la causa es un desarrollo insuficiente del maxilar. Como resultado, la mandíbula se coloca detrás, más atrás de lo normal. 

Las causas de la retrognatia pueden ser de dos tipos:

• Debido a la posición del mentón.
• Por un un problema esquelético. 

Algunos casos de retrognatia mandibular se deben a la falta de proyección hacia adelante de la barbilla. El problema esquelético se produce cuando la mandíbula está subdesarrollada con respecto al maxilar superior.

El retrognatismo mandibular está directamente relacionado con las maloclusiones de Clase II y es todo lo contrario al prognatismo, en el que hay un exceso de proyección mandibular hacia adelante.

Las causas de esta deformidad dentofacial suelen ser genéticas, pero también se puede desarrollar como consecuencia de ciertos factores ambientales. Por ejemplo:

• Hábitos durante la infancia como chuparse el dedo o usar chupete frenan el crecimiento de la mandíbula y pueden desencadenar un retrognatismo.
• Deglución atípica.
• Factores hereditarios. 

Tipos de retrognatia

Dentro de esta condición hay diferentes grados. Existen casos de retrognatia leve y casos de retrognatia severa. Pueden darse los siguientes casos:

• El maxilar superior está en posición prognática o se ha desarrollado en exceso.
• La mandíbula está está subdesarrollada.
• Los dos casos anteriores.

Esta afección puede también dar lugar a ronquidos durante la noche y a la apnea obstructiva del sueño. 

Micrognatia y retrognatia

Es conveniente diferenciar la micrognatia (la hipoplasia afecta a toda la mandíbula, tanto el maxilar superior como el inferior) de la retrognatia (dislocación posterior de la mandíbula en relación con el maxilar superior, con una hipoplasia que solo afecta al diámetro anterior-posterior de la mandíbula). Es decir, la micrognatia hace alusión a una mandíbula más pequeña de lo normal mientras que en la retrognatia la mandíbula tiene unas dimensiones correctas pero el maxilar inferior se encuentra desplazado hacia atrás.

Retrognatia tratamientos

Dado que la retrognatia puede ser impactante desde el punto de vista estético, son muchos los pacientes cuyo plan de tratamiento puede incluir una cirugía maxilofacial como la cirugía ortognática. En los casos más graves para la corrección de la retrognatia se realiza una combinación de ortodoncia y cirugía ortognática. De esta manera se pueden obtener resultados casi inmediatos.

En los casos menos graves, será el dentista quien evalúe qué tipo de tratamientos deben realizarse en cada caso. Los tratamientos dentales pasan por el uso de ortodoncia o aparatos de ortodoncia que ayudan a mejorar la posición de los dientes y la mandíbula. Es muy común encontrar en consulta a pacientes con un leve grado de retrognacia donde el uso de ácido hialurónico ayuda a suavizar las características, sin la ayuda de intervenciones quirúrgicas o tratamientos invasivos.

Algunos de los tratamientos para esta condición son:

Mentoplastia o genoplastia

Cuando la retrognacia se debe a una mandíbula mal proyectada sin ningún problema esquelético o dental entre los maxilares superior e inferior, el problema se corrige realizando una mentoplastia. Esta cirugía se realiza a través de una incisión intraoral entre el labio inferior y las encías para realizar la osteotomía y reposicionar el mentón. La fijación avanzada de la barbilla se lleva a cabo por medio de una mini placa de titanio producida especialmente para cada paciente

Cirugía ortognática

Para resolver una retrognacia causada por un problema esquelético, lo más habitual es recurrir a la cirugía ortognática. El objetivo de esta cirugía maxilofacial es conseguir una oclusión adecuada que permita resolver los problemas de la mordida y hacer que este cambio sea a largo plazo. La cirugía ortognática, dependiendo del problema esquelético de cada paciente, puede ser monomandibular o bimaxilar. 

Se lleva a cabo para colocar la mandíbula a la posición correcta, buscando la armonía facial y la recuperación de la funcionalidad de este hueso. Con esta cirugía se mejora la respiración, el habla y la masticación, ya que esta posición de la mandíbula puede ocasionar problemas de ronquidos y apnea del sueño, debido a la posición retraída de la mandíbula, que estrecha las vías respiratorias.

Ortodoncia

Si el problema no es muy grave, se puede usar ortodoncia para camuflar la retrognatia sin cirugía y mejorar la apariencia mandibular. Sin embargo, es más efectivo si se realiza en niños. 

Se puede usar ortodoncia convencional o alineadores invisibles para corregir la mordida. En algunos casos es necesaria la extracción de alguna pieza dental, pero también es posible usar aparatos como el péndulo de Hilgers para evitarla.

Retrognatia bebé: la retrognatia mandibular en niños

Es posible diagnosticar la retrognatia en niños a partir de la primera infacia. Para solucionar el problema modificando el crecimiento, hay que usar ortodoncia y tratamientos biomecánicos que permitan modificar la posición de los maxilares. 

Además, una retrognatia evidente en bebés, nos puede hacer sospechar que el bebé sufre de frenillo lingual corto o anquiloglosia.

Retrognatia y chupete

El uso durante un tiempo muy prolongado de chupetes en niños es una de las causas más comunes de retrognatismo mandibular. Usar el chupete durante mucho tiempo puede causar retrognatia, por eso es conveninete que limites el uso en tu bebé.

Te dejamos un vídeo que habla de la retracción mandibular en bebés:

Preguntas frecuentes

¿Retrognatia qué es?

La retrognatia es una deformación de la mandíbula inferior en la que esta se encuentra proyectada hacia atrás en relación con el maxilar superior.

¿Es posible solucionar el retrognatismo mandibular sin cirugía?

Si. En los casos más leves puede bastar con la elección de un tratamiento de ortodoncia. Sim embargo, en los casos de retrognatia mandibular severa puede ser necesario recurrir a la cirugía.